Con la presencia de trabajadores extranjeros, en Qatar se han ido introduciendo alimentos de todo el mundo, aunque la cocina nacional se ha visto poderosamente influenciada por sus estrechos vínculos con Irán y India.
Los musulmanes son los que por lo general, se abstienen de comer carne de cerdo y beber alcohol. Hay algunos alimentos que son fundamentales en Qatar, como las manzanas ácidas y los frutos secos, además de los mariscos. Un plato tradicional es el machbous, que está hecho con un arroz especiado combinado con carne o mariscos y se sirve, como es costumbre local comer, en una gran fuente comunitaria.
La principal comida se come al mediodía, y las más ligeras en la mañana y la tarde, aunque muchos están adquiriendo la costumbre de comer además por las noches. Las familias se reúnen a comer luego de orar el día viernes al mediodía. En el mes del Ramadán, se ayuna desde el amanecer al anochecer, pero apenas termina el ayuno viene el desquite.
El café es una característica central de la cocina. El café se sirve endulzado con cardamomo en pequeñas tazas con forma de dedal. Hay un café dulce, que se prepara con azafrán, cardamomo y azúcar, muy solicitado para ocasiones especiales.
Los estratos sociales se dividen según la nacionalidad y ocupación. Los salarios se concentran según la nacionalidad de los trabajadores, y esto ha generado desigualdad, sin embargo, el ambiente es tolerante y permite que por ejemplo, los niños estudien en las mismas escuelas y se compre en los mismos mercados una gama de comidas internacionales.