LAS dificultades han ocurrido para aprobar los nuevos presupuestos del Principado de forma simultánea al cambio en la estructura del Gobierno han quedado allanadas. Revisados los calendarios parece que PSOE e IU van a poder adelantar las cuentas regionales para el año 2009 con los nuevos consejeros desarrollando sus funciones. El obstáculo puesto por el PP para impedir el procedimiento urgente en el cambio de Gobierno no ha servido para nada, salvo para mostrar las malas relaciones que hay entre el Gobierno y la oposición.
El nuevo Gobierno se relaciona con los próximos consejeros de IU, Noemí Martín y Aurelio Martín, que se harán responsables de las consejerías de Bienestar Social y Vivienda, y Medio Rural.
El presidente Areces ha dado a conocer su deseo de realizar más cambios en el Ejecutivo, aprovechando la formación del Gobierno de coalición. El presidente informo que en su visita oficial a Qatar iba a meditar sobre ello, y ya está de regreso.
Javier Fernández y Jesús Iglesias justificaron el pacto de gobierno por la crisis económica. La necesidad de tomar medidas para paliar los efectos de la crisis habría sido la llave del acuerdo.
Con bonanza económica no fue posible el Gobierno de coalición, y con crisis económica se vuelve indispensable. Esto sirve para que hagan cambios en consejería por que una cosa es hacer la alineación de un equipo de gobierno en épocas cercanas al pleno empleo y otra muy distinta para un periodo de recesión como el que nos espera.
Lo que se considera primero es sobre la reestructuración del Gobierno tiene que ver con el desgaste de un mandato en el que los problemas se van a multiplicar. La aparición de caras nuevas es un recurso ante la erosión que produce la gestión del poder. Pero si se se tiene constancia de que alguien no tiene la capacidad se le agradece y se manda para su casa. Ahora bien, la verdadera razón para hacer un relevo más amplio en el Gobierno es otra.
Si la solución para la crisis pasa por dos consejeros de IU, quiere decir que el PSOE aporta poco a la nueva situación. Para verlo más claro hagamos una hipótesis: el presidente cambia a seis consejeros, cuatro de ellos del PSOE. El protagonismo de IU en el cambio de Gobierno se diluye. ¿Habrá pensado Areces algo así en Qatar?